- España necesitará 1,6 millones de perfiles técnicos y cualificados en la próxima década
- En España en 2026 el nivel de empleo se situará por encima del máximo histórico que se registró en 2007 y se crearían 2,6 millones de nuevos empleos
- 2,3 de los 2,6 millones de ocupados tendrán un nivel de formación medio-alto
- En el desglose de los sectores, cuatro áreas de actividad generarán 1,2 millones: sanidad y servicios sociales, industria, comercio y servicios a las empresas
De izquierda a derecha: Eugenio Prieto, presidente de AT Kearney, Raúl Grijalba, presidente de Manpower Group, José Luis Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España, Josep Oliver, autor del estudio y catedrático de la UAB, Paloma Barba, directora de Operaciones de Teléfonica Educación Digital y Ramón Paredes, vicepresidente de Relaciones Gubernamentales e Institucionales de SEAT y el Grupo Volkswagen.
Madrid, 6 de julio de 2018.- El Índice ManpowerGroup conmemora su 50 edición con una proyección sobre el Futuro del Empleo en España de aquí a 2026. El estudio anticipa que los grandes beneficiarios del aumento del empleo que registraremos en la próxima década, serán profesionales, técnicos y trabajadores cualificados. Así, los 5,2 millones de empleos que existen en la actualidad dentro de esta categoría, alcanzarán los 6,3 millones en 2026.
Entre los 2,6 millones de nuevos puestos que el estudio calcula se crearán, 1,1 millones serán profesionales y técnicos de apoyo y 560.000, trabajadores cualificados. En especial aumentará el empleo entre profesionales del derecho, ciencias, salud y las TIC; además de técnicos también del sector sanitario y ventas. Dentro de la categoría de los trabajadores cualificados, de nuevo tendrán especial relevancia el número de puestos creados en sanidad, comercio y restauración. En el resto de categorías se registrará estabilidad, con la excepción de los directivos, que pasan de aportar cerca del 5% del empleo en 2011 al 2,5% en 2026.
Este estudio único en su materia, presentado este jueves en la Cámara de Comercio de España, quiere aportar nuevas perspectivas sobre el Futuro del Empleo en España en los próximos diez años y los retos que plantea a la sociedad. Raúl Grijalba, Managing Director de la Región Mediterránea de ManpowerGroup, explica que “Como expertos en el mundo del empleo, pensamos que tenemos la responsabilidad de elevar la mirada y, explicar hacia dónde nos encaminamos. El mundo vive una transformación inédita a una velocidad sin precedentes con un nivel de cambios competenciales acelerado mientras que un 45% de posiciones quedan desiertas. Por eso, empresas, instituciones y gobiernos deben construir talento e impulsar un pacto por la educación y la empleabilidad que garantice la entrada en el mercado de los jóvenes y actualice a aquellos profesionales que sufrirán un impacto en su empleo por los cambios tecnológicos”.
El presidente de la Cámara de España, José Luis Bonet, defendió el papel de la educación para hacer frente a los cambios que la globalización y la transformación digital provocan en el modelo productivo. “La economía española necesita vincular estrechamente el sistema educativo con las necesidades competenciales que las empresas buscan en el mercado laboral, mejorando tanto la empleabilidad de las personas como la competitividad de nuestro tejido productivo y el bienestar colectivo”, ha asegurado. El presidente de la Cámara de España puso cifras al desajuste entre oferta y demanda laboral: una tasa de paro juvenil del 36,3 % y dificultades de las empresas para cubrir entre 300.000 y medio millón de puestos de trabajo. José Luis Bonet ha defendido el diálogo para resolver ese problema: “Desde la Cámara de Comercio de España defendemos la necesidad inaplazable de un Pacto de Estado por la Educación, la Formación y el Empleo, con medidas orientadas de modo urgente y principal a la disminución del desempleo y a la estabilidad y mejora del sistema educativo”.
Según el profesor Josep Oliver, autor del estudio y Catedrático emérito de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona, “Hay dos aspectos relevantes, la dinámica de la población en edad de trabajar, sin la que es imposible comprender el choque inmigratorio, y la adecuación del sistema educativo a las necesidades del tejido productivo. Ambos elementos se refuerzan mutuamente, porque no es sólo que las generaciones de menor edad hayan perdido un importante volumen de sus efectivos, y vayan a continuar perdiéndolos la próxima década, sino que también son relevantes las transformaciones en su calificación educativa”.
Durante la presentación del informe se celebró, además, una mesa redonda en la que se debatió sobre ¿Cómo mejorar la empleabilidad de los jóvenes? Las ayudas del Fondo Social Europeo, en el que participaron Ramón Paredes, vicepresidente de Relaciones Gubernamentales e Institucionales de SEAT y el Grupo Volkswagen; Paloma Barba, directora de Operaciones de Telefónica Educación Digital; y Eugenio Prieto, presidente de AT Kearney.
La formación superior se impone en la próxima década
Si hablamos sobre cuáles van a ser los niveles de formación más demandados por las empresas, 2,3 de los 2,6 millones de ocupados tendrán un nivel de formación alto (FP, licenciados, ingenieros, arquitectos, doctores y diplomados).
Por el contrario, en los próximos años se aprecia una caída de los ocupados de nivel bajo (-0,7% anual), retrocediendo su peso desde casi el 35% a escasamente el 28% del total.
De hecho, en 2026 este último grupo apenas aportará empleo. En cuanto a los ocupados de nivel medio (bachillerato y formación profesional), en este caso sí que se aprecia un aumento significativo del 1,6% anual.
El sector servicios, el mayor generador de empleo
En el desglose de los sectores, cuatro áreas de actividad generarán 1,2 millones de los 2,6 millones de empleos, cada una de ellas una media de 300.000 nuevos empleos.
Estos son sanidad y servicios sociales, industria, comercio y servicios a las empresas. En conjunto, sólo éstas coparán 1,2 millones de los 2,6 millones de aumento total que se espera para la próxima década.
Además de las anteriores, hostelería, transportes y comunicaciones, construcción y otros servicios también aportarán un importante número de empleos, alrededor de 200.000 cada una. En total, unos 800.000 de los 2,6 millones de aumento total. De esta forma, estas ocho áreas de actividad, básicamente terciarias con la excepción de otras manufacturas y construcción, generarían unos 2 millones de nuevos empleos, unas tres cuartas partes del total estimado para la próxima década.